domingo, 30 de junio de 2013

Calle Mayor

Si atracamos en el puerto de Cartagena, hacemos entrada en la ciudad por la Rua Principal, denominada actualmente calle Mayor. Esta calle principal es de las más antiguas, diciéndonos la tradición, no demostrada, que las aguas llegaban hasta la embocadura de ella, siendo desde siempre de las más concurridas, siendo paso obligado de cualquier acto o procesión.












En esta calle se levantaban los mejores edificios, moradas de las autoridades y de los hijosdalgo cartageneros. Noticias de esta calle como tal tenemos desde 1570, en el que se hizo un frontón para un juego de pelota. A la entrada de la calle Mayor, a mano izquierda, se levantó a principios del siglo XVI el Hospital de Señora Santa Ana, mas tarde de San Juan de Dios, y que duró hasta 1835, alcanzando sus dimensiones hasta casi al frente de la calle de Andino. En 1582 se prohíbe la entrada de carros bajo multa de 1.000 maravedises por cada carro que entrase, en 1590 se renueva dicha prohibición colocándose mármoles y pilares a la entrada, igualmente refrendada en 1601 al prohibir el ayuntamiento el paso de toda clase de carruajes por ser estrecha y de carrera pública, y en consecuencia manda aderezarla convenientemente, reparando y reponiendo los mármoles. En esta calle residía en 1614 el Duque de Saboya, el príncipe Emanuel Filiberto, vivienda situada en la esquina con la calle Andino. En 1766 se propone reparar el enlosado de la calle Mayor.
Entre los edificios principales de esta calle podemos encontrar:


-      Casa Cervantes, número 11, primera obra de Víctor Beltrí en el año 1900, de estilo modernista, bajo el encargo del empresario Serafín Cervantes Contreras. Destaca por sus dimensiones sobre los demás edificios modernistas situados en esta misma calle. La fachada incorpora los típicos miradores blancos cartageneros. Abundan los símbolos relacionados con el comercio, la industria y la minería. En este edificio, antes de pertenecer a la CAM, se encontraba el restaurante Café España, destacando unos dulces llamados “suspiros” en los cuales se inspiró el compositor Antonio Álvarez Alonso para componer el famoso pasodoble Suspiros de España.

-         Casino de Cartagena, número 13, está declarado Bien de Interés Cultural por la Región de Murcia. El origen del edificio es del siglo XVIII (Palacio del Marqués de Casatilly), reformado en 1870 y definitivamente en 1897 por Víctor Beltrí. Esta casa alojó en 1823 al Mariscal de Francia Gabriel Jean Joseph Molitor, Conde de Molitor. El edificio ocupa una superficie de 659 m².











La puerta de acceso al casino ocupa las alturas del bajo y el entresuelo, diferenciándose plásticamente del resto de la fachada por sus muros acristalados con pilares y vigas de hierro, denominadas 'peceras'.

El primer piso tiene un balcón principal, más adornado que los otros cinco restantes. Sus enmarques y guardapolvos están decorados con latiguillos, y el diseño de los hierros se basa en el tema de la palmeta, similares a los del interior del Casino de Murcia. La planta superior es una sucesión de columnillas con capitel geométrico que sugieren una galería. Entre ellas se alternan ventanas y medallones que representan la guerra, las artes, la industria, el comercio y las ciencias. El edificio se organiza en torno a un patio central con galería en la segunda planta, a la que se accede por la escalera de madera, que se encuentra a la derecha del patio.

En los pisos principales se reproduce el mismo esquema, con las estancias perpendiculares y paralelas en torno al patio y la galería. En ellas los socios practicaban tertulias, jugaban al billar o al ajedrez, leían la prensa, organizaban actos, etc. Uno de los aspectos más atractivos del Casino cartagenero es su sistema de iluminación cenital, que distribuye la luz entre las principales estancias del edificio. En el interior, por el patio acristalado y la galería del primer piso que lo rodea, junto a los lunetos de las cajas de la escalera. También llega la luz a la galería superior, de madera y con cristales grabados al ácido que reproducen palmeras y cañas de indias.

La decoración es predominantemente modernista, destacando los muebles de Viena que se adquirieron para el gabinete de lectura, el aseo y el zaguán. Los azulejos de la entrada y del patio son de Triana, y las dos muchachas lámpara es probable que procedan de una fundición francesa. El arquitecto Beltrí diseñó también las columnas del patio, labradas en mármol blanco al estilo de las de la Universidad de Barcelona. La escalera de madera es de Amaré, que realizó trabajos de forja en las barandas y sus barrotes tienen formas bulbosas y flores. Una de las salas modernistas más impresionantes, está decorada con un estilo muy refinado. Tiene un zócalo de madera ondulado con decoración floral y de círculos vieneses, y por el techo se dibuja una cenefa de flores. En el centro hay una escultural lámpara llamada 'Gloria coronando al Genio', de probable procedencia francesa. Todas las paredes de la biblioteca y su acceso están cubiertas de madera, dando a la estancia un estilo de sobriedad. La sala está iluminada cenitalmente por una claraboya alargada con estructura de madera y adornos de azulejos. Los cristales de la biblioteca son también grabados al ácido, como los de la galería, con temática de cañas de indias y una alta calidad. Los que se encuentran en la puerta del bar, en el patio, tienen una temática diferente en cada hoja: pájaros, jóvenes y atardeceres, enmarcados en el más puro estilo modernista.

-     Casa Llagostera, número 25, obra de Víctor Beltrí para la familia Llagostera, comerciantes catalanes afincados en Cartagena dedicados a la industria textil. La fachada de este edificio construido en 1916 está concebida como soporte de la decoración cerámica, reduciéndose en su construcción al esquema cartagenero a base de balcones centrales y miradores laterales. La obra cerámica de Gaspar Polo reproduce las figuras alegóricas de Minerva y Mercurio y los escudos de Barcelona, Cartagena, Murcia y Manlleu.













-    Iglesia de Santo Domingo y Capilla Marraja, número 28. En 1580 se fundó el convento de predicadores de Santo Domingo bajo la advocación de San Isidoro.

Por Real Decreto de 25 de julio de 1835 fueron suprimidos los conventos, vendiéndose a particulares toda la parte del inmueble que estuvo destinada a la comunidad, quedando sólo la iglesia. En 1875 fue declarada Parroquia Castrense de San Fernando. De esta iglesia compra la Cofradía Marraja una capilla de reducidas dimensiones, en 1641, para rendir culto a su Titular, siendo éste el primer documento que existe de dicha cofradía. Dicha capilla sería posteriormente ampliada, y su configuración definitiva tuvo lugar en los años iniciales del siglo XVIII. De esta capilla saldrían las procesiones marrajas de la madrugada y noche del Viernes Santo. Actualmente se puede visitar un precioso retablo barroco finalizado en 1731.







Esta calle también recibió el nombre de Calle de la Marina Española en 1868; con motivo del éxito en las pruebas del submarino en 1889, es llamada de Isaac Peral.

Bibliografía:
-          Fechas y fechos de Cartagena. Isidoro Martínez Rizo. 1894
-          Historia de las calles de Cartagena. Federico Casal. 1930
-          Calles de Cartagena. Juan Antonio Gómez Vizcaíno.
-          http://www.cartagena.es
-          http://es.wikipedia.org
-          http://casinodecartagena.org/



lunes, 24 de junio de 2013

Llamada

La Cuaresma en Cartagena empieza el Miércoles de Ceniza con la popular Llamada. Antiguamente se realizaba esta llamada en lo alto de la Puerta de la Villa, donde unos hombres, provistos de grandes tambores, los hacían resonar para anunciar la salida de las procesiones en la ciudad (su perímetro era muy limitado, y este gesto tenía toda la importancia pues no siempre se podían sacar las procesiones), llegando su sonido a los barrios extramuros de Santa Lucía, Concepción o San Antonio Abad. Esta forma de comunicación desapareció a finales del siglo XVIII, siendo en la actualidad una charanga, interpretando las típicas marchas de judíos y granaderos, la que recorre las calles de Cartagena precediendo a las cofradías, y una vez recogido el talón que hace entrega el Ayuntamiento para ayuda a la Semana Santa, sigue hasta llegar a la Caridad.

Las cuatro cofradías pasionarias cartageneras celebran sus reuniones o cabildos generales en la tarde de este día, con el fin principal de acordar, entre todos los hermanos, el sacar o no las procesiones. Una vez llegado a ese acuerdo, salen a la calle y se van reuniendo los hermanos de cada cofradía siguiendo la música que les lleva al Ayuntamiento, para dar cumplida información de ese acuerdo al Alcalde-Presidente de la Ciudad.

A partir de este momento, es raro el día en que no haya ningún acto, que puede ser una misa, exposición, concierto, obra de teatro, presentación de libro o revista, etc. La Junta de Cofradías, unión de las cuatro cofradías, realiza los nombramientos de Nazarena Mayor y Pregonero de la Semana Santa. También hacen las Cofradías sus misas solemnes, empezando la Cofradía del Resucitado con su Resurrexit, celebrado en sábado en la Iglesia de Santa María; le sigue la Cofradía Marraja con el Miserere; tras éste, la Cofradía del Socorro celebra su Misa Solemne, también en viernes como los marrajos y en la Iglesia de Santo Domingo; y por último, la Cofradía California celebra en la Iglesia de Santa María su Salve Grande el miércoles de la semana anterior al Viernes de Dolores, fecha de arranque de la Semana de Pasión cartagenera.